CHICOS
Por Alejandro Vázquez Zúñiga
Fotografía Miryam Almanza
Juan Manuel Bárcenas presenta una versión libre del clásico teatral LGTB de Crowley. Lo hace -como es su costumbre- corriendo los riesgos necesarios.
Una vez más, Bárcenas se atreve con un trabajo coral, en este caso nueve actores (todos en altísimo rendimiento), para contar la anécdota de sinopsis: un hétero que irrumpe en una fiesta de homosexuales, lo que desemboca en una serie de confrontaciones y confesiones. Para subrayar el efecto intrusivo del personaje, el director escogió un espacio naturalista, y lleva el naturalismo al límite (y en buena medida se nota que también sus actores): somos, el público, un ente que presencia una fiesta en toda norma: los personajes se mueven por espacios reales, no hay piernas ni telones, ni luces, ni incidentes externos a lo que sucede en la realidad escénica. Beben, comen, fuman, bailan, escuchan música. El artificio consiste en que nada sea artificio. Un dispositivo que resulta refrescante.
La pieza llega a donde debe llegar, y en algún momento algunos de los actores (y claramente los protagonistas) alcanzan estado de gracia. Carlos Enero Manolo Velasco y Roberto Martínez Belmont consiguen un momento glorioso, de furia, de rabia, de amor.
Si acaso podría criticarse algo es que por momentos los actores se regodean con la comedia, y por algunos instantes no saben parar a tiempo, pues Chicos es, en toda norma, una pieza.
Juan Manuel Bárcenas es conocido por sus procesos largos y la libertad para que sus elencos construyan desde la introspección, esta libertad siempre es un riesgo enorme que ya se ha vuelto su sello: el del director invisible y sin embargo en ese statement también ha encontrado una voz poética con su estilo.
Chicos es un interesante ejercicio teatral sobre el amor, el deseo, la libertad, la congruencia, la fidelidad, la soledad, la crueldad. Un trabajo que vale la pena ser visto.
La puesta en escena está en Artefacto este fin de semana y el siguiente a partir del miércoles, a las 20:30, con un costo de $200 pesos.
