FIN DE CURSOS ESCÉNICOS
Texto por Julieta Orduña Guzmán
Fotos del archivo de A Escena
Como ya es costumbre, año con año, en los meses de mayo, junio y principios de julio, las instituciones educativas muestran sus mejores trabajos realizados durante todo un año o semestre, según sea el caso, como en escuelas de estudios superiores. En este año se anunciaron en redes sociales varias propuestas escénicas de Teatro y Danza, mencionaré algunas de ellas.
En mayo se dio cita un proyecto de la Universidad Politécnica con la obra Y no quedó ninguno… en la verdad encontrarán su destino, basada en el best sellar de Agatha Christie: Los diez negritos. En este montaje debuta como director Diego Cervantes y lleva a escena a varios estudiantes cuyo perfil estudiantil no es propiamente de artes y humanidades, sin embargo, la universidad ha tratado que por medio del teatro se les dé una muestra de esta disciplina, al igual que en otros grupos de teatro como el del Tecnológico de Aguascalientes o el del Tecnológico de Monterrey campus Aguascalientes.
Otro de los grupos que, sin duda, siempre es recordado y nombrado cuando se refiere a teatro estudiantil es Rosa Guerrero, de la Preparatoria Benito Juárez, ya con más de 20 años de existencia, y con dos directores a su cargo; en su primera época, José Luis Araiza y en la segunda, Abdallah Téllez. Este último ha llevado al grupo a ser reconocido a nivel nacional, ya que fueron ganadores en alguna ocasión en un Festival Nacional Artístico de Preparatoria Federales. La obra que presentaron como graduación del taller de teatro, que dura tres años, fue Bonanza, de Arturo Amaro, dirigida por Abdallah y Marcela Martínez. Bonanza ya había sido montada hace algunos años en fin de cursos, pero por la temática muy adoc para los adolescentes, se retomó y tuvo el mismo éxito que en ocasiones anteriores.
Este camino de éxito de puestas en escena de corte estudiantil lo sigue también el taller de teatro de la Preparatoria Francisco I. Madero. Particularmente, considero a los grupos Rosa Guerrero y Madero los que despuntan en constancia y profesionalismo, ya que de ellos han surgido talentos que ahora no sólo trabajan en el estado, sino que han mostrado sus trabajos a nivel nacional. El maestro Luis Pérez Chiu, quien también funge en sus obras como dramaturgo, presentó este año otra temática: el duelo, la pérdida de un ser querido, sentimiento que varios estudiantes han experimentado como situación de vida, por lo que Madre, ¡No te vayas! fue un conmovedor trabajo que, a diferencia de los anteriores, presentó un melodrama que a más de uno conmovió.
No únicamente las escuelas de nivel medio superior están vigentes año con año sino también las secundarias y hasta las primarias; una de ellas es la Escuela Robregil, dirigida por el maestro Gilberto Breceda, con más de 40 años de fundación del grupo Titiritín, quien este año presentará El príncipe de Egipto en un gran espacio, el Teatro Aguascalientes. Cabe destacar que más de 100 niños y adolescentes participarán en esta puesta en escena, gran hazaña para cualquier maestro la de coordinar a tanto niño y joven con el fin de encauzarlos en el arte y la cultura.
De las escuelas que inician con estos festivales artísticos anuales se encuentra la bilingüe New World Multicultural School, que en su evento integraron música, danza y teatro titulado Uniendo al mundo, cuyo tema fue los mundiales de fútbol que se han llevado a cabo por todo el mundo.
La Danza no podía quedar atrás, y por ello en el mes de junio, en el Teatro Morelos, se dieron cita las prácticas escénicas de la Licenciatura de Danza Contemporánea y de la Licenciatura de Danza Clásica, ambas de la Universidad de las Artes, con una gran entrada en todas las funciones.
Esto y más se ha dado en estos meses de graduación, y en verdad es un gusto ver a tanto talento joven que no sólo cumple una materia humanística, sino que plasma su entusiasmo al estar en escena, lo cual me lleva a pensar que el talento existe, oportunidades también, únicamente es decisión y ganas de hacer las cosas. ¡Nos vemos en el teatro!